© Orquesta de Pulso y Púa de Tudela de Duero

REPERTORIO

• La leyenda del beso, intermedio
de Soutullo y Vert

EL AUTOR

Soutullo y Vert

Reveriano Soutullo (Puenteareas 1884-Madrid 1932, en la foto) y Juan Vert (Onteniente, 1890-Madrid 1931).

Compositores y autores de diversas zarzuelas, casi siempre en colaboración.Es uno de esos raros casos en la historia de la música en los que resulta posible alcanzar notables resultados artísticos a través de una íntima colaboración. Ambos músicos y con escasa diferencia de edad, provenían de un ambiente musical que fue el que determinara sus profesiones. Su alianza llegó a su máximo apogeo con el tríptico formado por las zarzuelas, La leyenda del beso (1924), leyenda-cuento donde los zíngaros ocupan un destacado lugar; La del soto del parral (1927), que se desarrolla en un pequeño pueblo segoviano, siendo sus protagonistas las mujeres y los hombres dedicados a la labranza; y El último romántico (1928). Aunque ambos compusieron algunas zarzuelas y obras de otro género por separado, el verdadero éxito lo consiguieron juntos, puesto que se aunaban el talento dramático, casi verista, de Soutullo con la habilidad melódica y orquestal de Vert. Fueron como una perfecta comunión de espíritus que sólo en el momento de su síntesis son capaces de dar lo mejor de sí mismos.

En un primer momento interpretamos solo la parte más conocida del intermedio, aunque pronto se añadió el resto de la composición, el intermedio completo, la pieza más oscura de toda la obra y la que cierra la primera escena de la zarzuela.

La zarzuela fue estrenada en el Teatro Apolo de Madrid el 18 de enero de 1924. Es una obra en dos actos, original en prosa y verso de Soutullo y Vert, según el libreto de E. Reoyo, A. Paso (hijo) y S. Aramburo. Es en esta zarzuela donde se llega al mejor momento de colaboración entre Reveriano Soutullo y Juan Vert. Ambos músicos, con escasa diferencia de edad, provenían de un ambiente musical que fue el que determinaría sus profesiones.

El libreto de 'La leyenda del beso' pretendía la síntesis de la tragedia gitana de 'La tempranica' y el entorno de caza burguesa de 'La montería'. Para ello, se desarrolla en tierras castellanas a donde se ha dirigido el conde Mario para celebrar una cacería en la que anunciará su próxima boda. Poco antes de dar a conocer sus intenciones llega un grupo de gitanos que acampa en la zona y entre los que está Amapola, cuya belleza impresiona al joven noble. Sus pretensiones de cortejo, sin embargo, se verán truncadas por la leyenda del beso, en la que se proclama que la muerte alcanzará a quien bese a Amapola.

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