CANCIONES DE NUESTRA TIERRA PARA INSTRUMENTOS DE PÚA Y ACOMPAÑAMIENTO



Serrana mía




El día de las Candelas




La clara

 

PATRIMONIO MUSICAL

De la provincia salmantina recuperamos tres piezas. La primera, llamada El día de las Candelas, hace referencia a esta celebración, que se mantiene en muchos pueblos de Salamanca. Este día tiene lugar la víspera de San Blas, el 2 de febrero, y numerosos fieles acuden a la iglesia parroquial para recibir la bendición de las candelas.

La letra dice:

El día de las Candelas,
por ser día señañado,
jugaron a la pelota
tres mozos a tres casados.

Tadeo le dice:
hermano Manuel
quítate del juego
que vas a perder.

Si pierdo, que pierda,
ya estoy enterado
que para el verano
no cojo criado.

Otra versión es:

Para empezar a cantar
licencia le pido al pueblo,
a la señora Justicia
y al sacerdote el primero.

El día de las Candelas,
el segundo de febrero,
salió a misa de parida
María madre del Verbo.

María madre del Verbo,
Madre del Verbo divino,
salió a misa de parida
una mañana en Domingo...

Un refrán típico que hace referencia a esta fecha asegura que: "El día de las candelas entra el sol por las callejuelas"

Luis Díaz Viana, José Delfín Val y Joaquín Díaz escriben en el Catálogo Folclórico de la Provincia de Valladolid sobre la celebración de Las Candelas. "La fiesta de la Purificación de Nuestra Señora, conocida popularmente como Las Candelas, conmemora la presentación en el templo de María y su hijo Jesús (...) Entre los primeros cristianos fue una fiesta de gran solemnidad, a la que difícilmente se puede encontrar un precedente simbókico entre las celebraciones precrstianas. La fuerza del rito ha conservado la costumbre prácticamente intacta hasta nuestros días, en que -en muchos pueblos de Castilla- aún tiene lugar un acto durante la misa del dos de febrero. Alllegar al ofertorio, varias jóvenes -generalmente dos, que son mayordomas de la Virgen y que ese año cumplen la mayoría de edad- se acercan al altar llevando dos palomas, una luz y una tarta. El sacerdote recibe las ofrendas, y, tras depositar la tarta en el altar mayor, coloca la luz entre las manos de la VIrgen que está en andas, encendiendo con la llama de la candela todas las velas de la Corporación Municipal, situada en las primeras filas.


También de Salamanca es 'Serrana mía', jota típica de la zona sur de Salamanca, en los límites del valle del Jerte, que limita con la provincia cacereña y de Ávila. No en vano, Serrana mía es también popular de varias localidades abulenses, como El Barco de Ávila, que se considera a si misma como la patria chica de esta pieza. En varias páginas web dedicadas a este municipio recuerdan que Serrana mía es una creación de Víctor Pérez Pérez, en el año 1925, mientras era director de las escuelas de El Barco de Ávila, "aunque con el tiempo la canción ha sido adjudicada a la provincia de Salamanca".

Yo no tengo riquezas
serrana mía pero te quiero
y vale mi cariño
serrana mía más que el dinero

Una casita blanca
tengo yo en la ribera
y un corazón muy grande
serrana mía que a ti quiera
un corazón muy grande
serrana mía que a ti te quiere

En la rama de un árbol
serrana mía, canta un jilguero
y en sus cantes decía
serrana mía cuanto te quiero

Por el cristo del caño
serrana mía yo te lo pido
que mi corazón sane
serrana mía porque está herido.

La tercera jota tradicional de Salamanca que recuperamos en este especial es La Clara. Se trata de una tonada que dice:

La Clara cuando va a misa,
se pone en el Altar Mayor,
con el librito en la mano
pidiéndole a Dios Perdón.

¡Ay, guindilla, guindilla, guindilla
que ya no te quiere la de la toquilla.
Albardero, albardero, albardero,
que ya no te quiere la hija del herrero.

La Clara cuando va al baile,
forma corro alrededor,
habla, canta, toca y baila
hasta la puesta del sol.

¡Ay guindilla, quindilla, guindilla...

Es la Clara la mozita
más bonita que se vio
y que a todos lo mocitos
calabazas siempre dio.

¡Ay guindilla, quindilla, guindilla...

©2004 Orquesta de Pulso y Púa de Tudela de Duero